RIGE DEL 17 AL 20 DE MARZO
Proporciona el coraje y la fuerza espiritual para corregir nuestros defectos. Hay dos formas de purificación en la vida: dolor y transformación consciente. La transformación consciente le duele al ego, mientras que el camino del dolor duele al cuerpo. Este Nombre purifica el ego de sus cargas negativas de vidas pasadas, pero de forma misericordiosa.
También da fundamento y proporción al andamiaje de nuestras vidas, para no ir a la deriva por las mareas astrales. Lleva a tierra las energías sutiles: concreta y materializa, por lo que es una poderosa ayuda en la realización de cualquier intención. También confiere la vitalidad lunar, por lo que es un Nombre potente para la sanación, en particular para todas las enfermedades que tengan que ver con los fluidos del cuerpo.
El nombre consta de dos letras Mem unidas por una Vav. Mem es la matriz espaciotemporal de nuestras vidas, el útero materno que nos trae a la encarnación. Vav significa unión y fertilización. Mem Vav Mem indica que pasado y futuro están unidos, pivotando sobre el presente, y que hay una transferencia de información entre ambos.
Creemos que el pasado es algo ya fijo y escrito para siempre, pero en realidad no hay tal cosa como el pasado independiente de nuestra experiencia y percepción (interpretación) del mismo. Esto lo podemos cambiar, y con ello cambiamos el efecto kármico que puede tener sobre nosotros.
La meditación con este Nombre hace un trabajo de limpieza, purificación y neutralización del karma negativo. Y lo hace por el procedimiento que recibe el nombre de Teshuváh, retorno, es decir, rebobinado y borrado. No es un borrado sin más, es necesario modificar la semilla de negatividad en nuestra actuación diaria, que no es otra que el deseo egoísta de recibir.
Este Nombre tiene de valor numérico 86, el mismo que el Nombre de Dios Elohim-, que corresponde a la sefiráh maternal Bináh, cuya luz nos prodiga toda clase de cuidados. La palabra Mum- en hebreo significa “imperfección, defecto, mutilación e invalidez”. Por un lado indica que este Nombre corrige las imperfecciones y defectos acumulados a lo largo de vidas en un proceso final, que nos prepara para uno nuevo que comienza.
Activa en nosotros la capacidad sanadora. Ayuda a eliminar las ilusiones y a superar la depresión. Purifica a nivel espiritual, mental, emocional y físico.
Protege contra la desesperación. Ayuda a finalizar las cosas. Concede larga vida con plenitud. Despierta en nosotros la humanidad, la compasión y la actitud de servicio desinteresado.
Salmo 131:3
YAJEL ISRAEL EL ADONÁY MEATÁ VEAD OLAM
<<Espera oh Israel, en el Eterno, desde ahora y para siempre>>
Todo final lleva en sí la semilla de un nuevo comienzo (Salmo 131:3). Este Nombre nos trae la esperanza de que siempre habrá un nuevo comienzo. A veces experimentamos el fin como una muerte. Mum nos guía a través de todas las muertes y nos prepara para el nuevo nacimiento. Nos ayuda a regeneramos y a renacer de nuestras cenizas.